miércoles, 28 de septiembre de 2011

MISTERIO

MISTERIO

Nunca sucede nada en nuestra casa.
Todo se encuentra en orden, sosegado,
la piel ya es media piel de aburrimiento,
desplomadas las almas ya no vuelan
y resulta inasible la existencia.

Nunca pasa más nada en esta vida,
sólo la vida pasa; nunca a tiempo
vemos vibrar cometas en los ojos;
ni oímos el el cristal fino del sentimiento;
jamás hacemos caso del secreteo
del viento, potente, lleno de augurios,
ni gozamos su roce en medias caras
llenas de medios besos aplazados.

Jamás nos pasa nada entre las manos
cerradas al misterio que se escapa
junto a la vida misma que nos pasa
como si nada pasa en esta casa.






Primera estancia

Todo cabe en un cuenco de la mano extendida:
hasta el amor que asoma por un suspiro ajeno.

No caben, pero sirven, los mortales aullidos,
el rechinar de dientes, la crispazón de nervios;
el dolor de ausentarse de los brazos queridos
apenas se parece al desierto paisaje o a los
árboles yertos o a los ríos desecados o a los
sombríos batracios entre dos mundos fríos.

Caben, en cambio sí, los besos más sinceros,
los terrores insomnes por aprehender aquello
cuya naturaleza llama a jamás tener jaula;
cabe el misterio mismo vuelto son, metáfora
que grita las voces de la selva, gemidos
erotizados que braman en los montes.

En aquella primera de las albas humanas,
apalabrados ya, supimos que callamos.


Segunda estancia

Zarpazos con la voz, codazos con los ojos,
la ternura no anida cuando faltan palabras.

El tedio llueve a cántaros mientras enmudecen
los filosos cardúmenes de palabras:
No hay con quién hablar, ni a quién
decirle nada sobre el fuego y la lluvia.
El tedio gana todo mientras dos flores,
en silencio, son germinadas por un colibrí.








Tercera estancia

Museo de ruinas son mi estirpe y mi pecho;
legión de sufrimientos, enjambre de desdicha,
la esperanza. Todo el dolor habita el horizonte.

Una corteza cerebral en llamas, Prometeo:
saber cuesta más, mucho más de lo supuesto.
Conocer es desdicha y amargura. La conciencia
danza con un tridente y pincha hasta dañar
la gracia, la sonrisa, la fuerza y el futuro.

Mirar atrás supone no pronunciar los nombres
de los ancestros tenues, fantasmas vacilantes,
que soñaron andar caminos con espinas
y abrojos para sembrar paraísos de herencia.
La verdad sabe a sangre. Tiene cara sin rostro.



Cuarta estancia

Los sueños son regalo de los dioses
que nos sueñan a veces sin cuidado.

Ya no quiero soñar sueños ajenos
porque a tanto soñar los siento propios;
y no quiero que luego me reclamen
que esos sueños soñados no son míos,
cuando a tanto soñarlos ya me viven.

Vivo en los sueños propios aunque
algunos de ellos primero no eran míos.
Habito de puntitas, silencioso,
otros sueños, sueños de otros,
a hurtadillas.

Un dios sueña a otro dios y todos ellos
fueron soñados juntos, por el Dios primero.

sábado, 24 de septiembre de 2011

DAME LA VIDA



DAME LA VIDA


Dame la vida, vida;
dame la calma siempre.
Quiero tener tu prisa
para ir tranquilo,
todas las mañanas, todas las tardes,
todos los mediodías,
todas las noches,
sin odios y sin llanto...

Dame la vida, vida;
dame la paz
pero no quiero ni la paz porfiriana,
ni la paz de los pantoenes:
quiero la paz de la música y del viento;
la paz de los gorriones,
la paz de los árboles,
la paz del espíritu y la paz del amor...

Quiero vida, la vida;
quiero desparramarla esquina por esquina,
darla a sorbos a niños,
a jóvenes,
a adultos;
a sanos y a enfermos...

Quiero salud por ramas y por ramos
para coronar la vida cada mañana...

jueves, 22 de septiembre de 2011

M O R T A J A



Hemos de venir a menos,
cuando la montaña
deje que la alcancemos.

Mañana,
resulta un homenaje,
al apetito y la maña.

Sumemos.
Todo lo que hacemos aquì,
puede contar,
al momento en que
nos lleve el viento.

La mortaja prometida
es volver al viento.
El fuego habita
estancias de la
eternidad.
Pero la tierra es
pasajera:
volveremos al cielo,
que es de agua.

Compañeros peces,
hermanos acuàticos
de la eternidad.


(DEL LIBRO VAIVÉN, 1998)

miércoles, 21 de septiembre de 2011

¡¡¡Llegó el otoño...!!!





Ha llegado el otoño y,

cosa extraña,

nos saluda con lluvia,

un viento que lo anuncia,

pero un calor que no termina de irse.



El nuevo otoño llega;

y digo que es nuevo

porque ya las estaciones

se han convertido en la cosa más excéntrica.



Pero algo bueno hay en ésto,

la vida se renueva;

se ocupan los sujetos de cosas olvidadas,

logran revivirse anécdotas y

charlas de los viejos amigos...

pero, ¡eso sucede en todas las estaciones!

¿cuál es la novedad?

La novedad es simple,

pero muy complicada:

la vida sigue y todo es un milagro.



¡¡¡Viva la vida!!!

¡¡¡Viva!!!

sábado, 17 de septiembre de 2011

LA LLAMA DEL AMOR



No te apagues.

Permanece;

quémame,

dame la luz:

permíteme ser

en ella.



Llama del amor:

eres la enrededera

que cubre mis jardines.

Eres la luz

que logra iluminar

la noche.

SENTIMIENTO.wmv

27 La Rana

viernes, 16 de septiembre de 2011

Raúl Rodríguez Cetina (1953-2009) *




Recordar a Raúl Rodríguez Cetina (1953-2009) es entrar a la dimensión de la fatalidad, sin ánimo de intentar colocarse en ese ángulo o perspectiva, queramos que no. Se trató de un hombre signado por el dedo del drama existencial. Y decir eso no sólo hace referencia a su persona, sino también a su obra. Vida y obra pocas veces hacen tan hondo doble carril, como en este caso; paralelismo sin igual que parece signado por el mal fario. Conocí a este yucateco, por otro yucateco, también de nombre Raúl, Cáceres Carenzo; y casi de inmediato nos hicimos amigos. Asi fuí conociendo su novelística que, poco a poco, ocupó un lugar importante en la literatura mexicana contemporánea, como bien da cuenta de ello, por ejemplo, John Stubbs Brushwood (1920-2007), en sus estudios sobre la nueva novelística mexicana de los últimos años del siglo XX, especialmente en su libro “La novela hispanoamericana del siglo XX”.




Prácticamente leí todos sus libros. Todos con el dramatismo de su vida personal. Y los leí todos, desde “El desconocido”, pasando por “Alejamiento”, “Flashback”, “Fallaste, corazón”, “Lupe, la canalla”, “Ya viví, ¿ahora qué hago? Corazón de acero”, “Bellas en su abandono”; sólo en el caso de este último libro, citado así por avatares de la memoria, narraciones cortas (cuentos o biografías); pero las demás, novelas, todas, todas, dedicadas una a una por el puño del autor y con la doble dedicatoria a mi persona y a Emiret, mi compañera (por quien siempre tuvo una manifiesta admiración: “¡Cómo te pareces a, Claudia Sheffer”, le decía. Todas sus novelas eran autobiográficas según lo constaté y comprobé en múltiples charlas con Rodríguez Cetina; y su libro de cuentos, más dedicado a su otra afición, la admiración del mundo femenino y sus íconos. Insisto que me hice lector de la obra de RRC, a excepción de “El pasado me condena”, título que festejó conmigo cuando, vía telefónica me dio la noticia de su aparición, en coedición entre el Ayuntamiento de Mérida y Plaza & Valdés, y que me prometió, para lo cual me solicitó por enésima ocasión mi dirección: “pues te la voy a hacer llegar; con otro ejemplar para Cáceres, pues ya ves que él no tiene dirección”, me dijo. Insisto en que sus novelas, desde la primera hasta la última, son libros sacados de sus vivencias personales, desgarradoras, las más de las veces; libros fatales, desde el primero de ellos, hasta el último –“este es más autobiográfico que los demás”, según palabras del propio Raúl.
En “El desconocido” que salió a luz en 1978, por parte de una editora del sureste mexicano, Duncan editores, y reimpreso por Plaza y Valdés apenas en 2008 (y de algún modo reescrito por RRC), se dibuja la sombría semblanza de un niño que es violado por un hombre mayor y empujado por esa experiencia a la prostitución, en Mérida. Es evidente que se trata de una desgarradora confesión del autor sobre su propia experiencia con la doble moral meridana. Eso lo llevó a ser catalogado como parte importante de la literatura gay de nuestro país, al lado de autores tan importantes como Luis Zapata, Alberto Dallal, José Ceballos Maldonado, Miguel Barbachano Ponce y otros, según estudiosos del fenómeno como José Joaquín Blanco, Rodrigo Laguarda y Héctor Carrillo.




“Flashback” (1982), es la segunda de sus obras, en ella se da subrrayadamente cuenta del espíritu contestastario, inconforme, incómodo, siempre enemigo del establecimiento, de RRC.




En “Alejamiento”, que me parece su mejor obra y acaso la única con la que guardó cierto distanciamiento, aparecida en 1987, se cuenta la vida de una poeta suicida. Es acaso la obra más poética de Rodríguez Cetina pues logra convertir la desdicha en un lago de tranquilidad que acaso nos dice en el entrelineado del apego enfermizo de Raúl por el suicidio. Obsesión que lo llevó en más de una ocasión a intentar fugarse por la llamada “puerta falsa”. Era un caso absoluto de depresivo obseso.




Todas sus obras, como lo relatan en muchos de los casos los títulos mismos, están emparentadas con el cine. Al que RRC tenía un especial afecto y afición. Incluso su ritmo narrativo es, declaradamente, cinematográfico como lo reconocieron importantes críticos literarios nacionales, como Héctor Manjarrez, Sara Sefcofich, Vittoria Borsó, René Avilés Fabila, Margo Glantz, Juan Domingo Argûelles e Ignacio Trejo Fuentes, éste último acaso la última persona con quien Rodríguez Cetina bebió unos tragos, según me lo confesó en la última llamada telefónica que yo le hice, pocos días antes de su trágico fallecimiento a causa de un infarto al miocardio, según lo reza el parte médico oficial, fruto de la autopsia que le practicaran luego de haber muerto como un perro callejero, solo y su alma, hasta que los vecinos, extrañados por su ausencia, pero más que nada por el nauseabundo olor que se desprendía de su vivienda, iluminada desde hacía algunos días, dieron parte a la autoridad que descubrió el cadáver de varios días, según lo consignó, en nota periodística de Milenio, el propio Nacho Trejo el lunes 29 de noviembre. De acuerdo con lo indagado: el suceso, la muerte, ocurrió entre el 20 y el 22 de noviembre, aunque el hallazgo se dió hasta el 25 del mismo mes.




“Fallaste corazón” (1990), es la cuarta de sus novelas, con la que conquistó un buen número de lectores y críticas muy favorables. Sigue la brecha trágica; la brecha cetiniana.




“Lupe, la canalla” (1996) es una novela divertida, con fuertes tintes tragicómicos, pues parte de una relación heterosexual de Rodríguez Cetina con una admiradora que, a final de cuentas, llegó a convertirse en su mecenas y después en una auténtica carga existencial, para Raúl. Los que estuvimos cercanos al autor logramos conocer a esta mujer que iba a convertirse en personaje de una de sus obras más discutidas, y acaso menos logradas de este narrador mexicano.




Con “Ya viví, ¿ahora qué hago...”, se rompe una larga cadena de infertilidad que padeció Raúl por años, tantos que el libro aparece hasta, 2004, Acaso explicada por un proceso muy acelerado de deterioro personal, en la salud física, en el ánimo y en la salud mental de este hombre que parece desprendido de las páginas más desdichadas de la literatura mexicana. Y es precisamente su salud personal, el relato central de la novela, el deterioro físico, que en realidad llevó a Raúl a estar internado en un centro hospitalario por más de tres meses, fue el leit motiv de la narración angustiante, desgarradora; la tristeza y la soledad como núcleo de este relato.




La narrativa de Rodríguez Cetina constituye un aporte en el sinuoso y arduo camino en la lucha contra los clichés, el machismo y la deformación ideológica de amplios sectores de la sociedad mexicana. Podría decirse, sin exagerar, que RRC fue siempre un bastión de la lucha contra el provincianismo más chato. Además de militar siempre, con claridad, en el espectro más lúcido y menos discutido de la izquierda nacional. En reiteradas ocasiones escuché de su voz las quejas, sombrías siempre, por la situación económica, política y social de nuestro país. Sin perder por cierto una mínima esperanza que asomaba como una rendija de luz en su expresión porque las cosas cambiaran para mejorar.




No puede soslayarse, desde luego, por aparecer esta nota en las páginas de “La Colmena”, su participación en esta revista de la Universidad Autónoma del Estado de México. Fueron cuatro las aportaciones de Raúl Rodríguez Cetina para esta importante publicación del panorama cultural de la entidad y la nación. 1994, 1995, 1996 y 1997, en ese órden riguroso fueron los años en que RRC aportó sus artículos. La primera aportación de Raúl para “La Colmena” fue una traducción y notas a la misma de un artículo de Isadora Duncan, “Reflexiones después de Moscú” (No. 4, p.p. 25); después vinieron, ahora sí, aportaciones propias: “Antonieta Rivas Mercado, una mujer que puso condiciones al destino” (No. 7, p.p. 4), “Una escritora bella en su abandono” (No. 11, p.p. 14) y “Sensatez y sensibilidad de Charlotte Bronte” (No. 14/15).




Antonio Marquet, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana –UAM-, habla de la obra de Rodríguez Cetina para emparentarla, “por su carácter urbano”, con las tareas periodísticas, más que literarias, que hiciera David García Salinas en los Populibros La Prensa; y lo coloca, ahora sí desde la perspectiva de la literatura con autores como Carlo Coccioli y Salvador Novo, sus predecesores en la mal llamada “novela gay” de la literatura mexicana, en el siglo XX.




También tuvo este autor que se nos ha ido con el año, una larga carrera periodística. Fue del periodismo que Raúl logró sobrevivir siempre, aún en los peores momentos de su perenne crisis económica personal. Fue jefe de redacción de “Primera plana”, colaborador de El Día, El Universal y Por esto!. Y esporádico escriba para otras publicaciones del país y el extranjero.




No debe olvidarse sus tareas de traductor para una empresa privada, ligada a la aviación, en alguna época inicial de su estadía en el Distrito Federal, del que logró hacerse un verdadero “chilango”, pues cuando volvía de Mérida, me contaba que extrañaba “esta pinche ciudad a la que odio pero de la cual no puedo deshacerme ni en sueños”.


Descanse en paz Raúl Rodríguez Cetina. Ya leeremos su último libro, “El pasado me condena” y, si siguen abiertas las puertas de “La Colmena”, aquí mismo lo comentaremos. Cabe decir, como última acotación, que de acuerdo con informes extraoficiales, Plaza y Valdés publicará póstumamente “Turbulencias”.*

9-9 Juan salvador Gaviota (Español)

8-9 Juan salvador Gaviota (Español)

7-9 Juan salvador Gaviota (Español)

6-9 Juan salvador Gaviota (Español)

5-9 Juan salvador Gaviota (Español)

4-9 Juan salvador Gaviota (Español)

3-9 Juan salvador Gaviota (Español)

2-9 Juan salvador Gaviota (Español)

1-9 Juan salvador Gaviota (Español)

miércoles, 14 de septiembre de 2011

In A Gadda Da Vida - Iron Buttefly I

Entrevista a Benjamín Araujo

Entrevista de la escritora española, Nieves Marugan Romero a Benjamín Araujo M. Publicada en mayo 17, 2010:

1.- Define, de la forma más concreta y sintetizada, quién es Benjamín Araujo

Benjamín Araujo nació el 31 de marzo de 1949. De modo que, acaba de cumplir 61 años. Actualmente, y desde hace 34 años, vive con su esposa Emiret, de 49 años de edad, con quien procreó tres hijos: Venus, Karla y Marte. Benjamín es un hombre sincero; confiado y confiable. Nació en Toluca, estado de México; y ha vivido además de en su suelo nativo en: México, D. F., Querétaro, Texcoco y, esporádicamente por breves temporadas como paseante, prácticamente por toda la República Mexicana. Ha visitado 26 países, amén del propio.

Poeta y escritor. Tiene escritos y publicados 9 libros personales. Alrededor de una veintena de libros colectivos; ha escrito prólogo de alrededor de diez o doce libros más.

Es un hombre feliz y satisfecho. Lo que no quiere decir que sea un conformista.

Ha trabajado en 4 universidades autónomas de México; y ha sido, entre otros cargos, consejero y consultor de varios institutos de cultura mexicanos.

Actualmente trabaja para el Gobierno del estado de México, en la coordinación de Estudios y Proyectos Especiales de la Secretaría de Desarrollo Social.


2.-¿Qué disfrutas, qué cosas te gustan?

Primero que nada el amor, es lo más maravilloso que existe. Así lo he vivido con mi mujer, Emiret, durante 36 años, 34 de los cuales hemos estado casados. Por otra parte, hay muchas cosas más: La lectura, la música, la amistad; los buenos amigos, escribir y el buen vino.


3.-¿Qué cosas te disgustan?

La mentira, la corrupción y la ignorancia. No soporto la falta de democracia; y me parece terrible la demagogia.


4.-¿Cuál es tu profesión?

Estudié Turismo y Administración Hotelera, porque me gusta mucho viajar, pero me he dedicado (de eso he vivido, con honradez y decoro) a las letras, a la cosa editorial y a a la promoción de la cultura. Por eso, y para eso, he trabajado para cuatro universidades públicas mexicanas (las universidades autónomas: del Estado de México, Chapingo, Querétaro y Metropolitana-Azcapotzalco).


5.-¿Hasta qué punto tu familia ha influido en tu camino?

Mucho. Sin ellos no hubiera avanzado ni un tramo siquiera. Son mi eje central.


6.-¿Cuál era tu vocación?

Desde siempre: escribir. Eso lo descubrí desde muy pequeño. En amistad (una amistad sui géneris, por la diferencia de edades), con el poeta de Toluca, Heriberto Enríquez, que a la postre tenía 80 años, cuando yo sólo tenía 8.

Resulta que éramos vecinos (pues yo vivía a dos cuadras del Poeta). Él era amigo de mi familia paterna. Y un domingo, en que fuimos a comer a la casa de la abuela Dolores (madre de mi padre), lo conocí, y desde entonces se propuso, con una paciencia de santo, a leerme, todo tipo de literatura universal (adecuada a mi edad; o por lo menos lo que a él le parecía así); y así fue que mis padres, viendo mi interés tan marcado por las letras (o, cuando menos en ese momento, mi admiración y curiosidad por “El Maestro”), tomaron la decisión de incentivarme: si terminaba yo la tarea, podía visitar al profesor Enríquez. Y eso fue convirtiéndose en una costumbre durante por lo menos dos o tres años. Poco tiempo después el Poeta murió.

Sin embargo, yo crecí con esa semilla que, ya en mi adolescencia fue desarrollándose con mucha delicadeza, hasta hacerme, primero, un lector contumaz y, más tarde, hice mis pinitos en la escritura.


7.-Dime tu color y hora del día:

Rojo y jueves.


8.-Tu música preferida; un título:

De toda. Let It be, de Beatles.


9.-¿Por qué/para qué escribes?

Por necesidad. Para comunicarme con mis semejantes. Pero también, por qué no decirlo, para satisfacer mis ansias de lector. Hay ocasiones en que, al no encontrar qué leer, me propongo escribir algo que me satisfaga (afortunadamente, he desarrollado mucho el espíritu autocrítico y casi nunca quedo satisfecho con lo que hago. Por eso se me ha vuelto una obsesión escribir, con la conciencia de que algún día encontraré algo que me conmueva y logre llevarme hacia los demás. No existe en mí, afortunadamente el “ego” sumamente desarrollado con que cuentan muchos escritores que de ese modo logran perder el piso y sentirse autosuficientes. Por eso es que he llegado a la conclusión de que, al menos por el momento, no escribiría mi Autobiografía pues ¿quién soy?, ¿Qué he hecho o escrito de sobresaliente?, ¿qué me hace verme como algo fuera de lo común?



10.-Lo primero que llegue a tu mente al leer:

Acercarme a los demás. Y, casi al mismo tiempo, lograr la perfección. Que desde luego estoy consciente de que no existe. Pero es una aspiración que debemos tener los seres humanos en cualquiera de las actividades a que nos deiquemos.


Amigo=Fidelidad


Esperanza=Dios


Búsqueda=Una larga vida.


Planeta=Venus, Marte…o Tierra.


Libro= “El tambor de hojalata”, de Günter Grass.


Mujer= La perfección humana.


Edad= 61 años.


Crecer= Desarrollarse, trascender. Ser.


Sueño= Descanso. Reparación de la maquinaria humana. (Fábrica de fantasías; cuna de la ficción).


Hijo= Marte. (Venus, Karla, Marte; los tres hijos que procree en órden de “aparición”).


Arte= Buena vibración. Buen gusto. Gozo extremo.


11.-¿Qué extrañas en tu vida?

Nada. Vivo agradecido porque la vida me ha dado tanto. Puedo repetir la canción de Violeta Parra, “Gracias a la Vida”…


12.-¿Cuál es la meta de vivir?

Trascender. Dejar huella. Ser, antes que tener. Buscar la belleza y la bondad; la perfección, aunque sea imposible.


13.-¿Qué hay en tu interior?

Una bullente paz interior.


14.-Tu obra de arte favorita

Guernica”, de Picasso.


15.-¿En qué lugar te olvidarías del mundo…?

En el cielo.


16.-Define lo importante del ser humano, para ti

Tener una meta. Y darse a los demás.


17.-¿Qué parte de ti se perdió por el camino?

Tendría que analizar con severidad toda mi vida. No estoy seguro como para contestar; ni me creo preparado para dar una respuesta que me satisfaga.


18.-¿Qué ocurrirá en el 2012…?

Nada particular. Aunque hay que estar muy atentos a las predicciones de los Mayas…


19.-¿Qué te han aportado las redes Ning, Ias redes sociales?

Mucho. En realidad me han permitido ser, y sentirme, ciudadano del mundo. Tener conciencia de ciudadano del siglo XXI. Aunque creo que la llamada “globalización” no es cosa nueva, pues en realidad tenemos varios siglos con la certidumbre de estar en un mundo entrelazado, creo que estas redes han permitido que nos sintamos “vecinos”, “hermanos” del “otro”.


20.-¿Cuales son tus planes de vida?, ¿qué te queda por hacer?

Seguir escribiendo. No dejar de hacerlo hasta que muera. Gozar de la familia. Ver crecer a mis nietos; y, de ser posible, ver lo más adelante que la divinidad me tenga reservado.


21.-¿Qué cosa importante olvidé preguntarte?

Nada. Estoy satisfecho con la entrevista. Creo que nadie me había entrevistado con tal detalle y “con pelos y señales”. Muchas gracias. Y gracias por adelantado a quienes vean esta entrevista.

domingo, 11 de septiembre de 2011

ERNESTO CORTAZAR - Eternal Love Affair

José Alfredo Mondragón (1956-1990)

La muerte, siempre la muerte. La piedra de escándalo del olvido y del recuerdo. El misterio insondable permanente. La muerte como tema perenne de la poesía. Se muere desde el momento mismo del nacimiento; la agonía humana comienza con el soplo vital iniciador. Existe porque hay vida. El yin y el yang. An verso y reverso del momento que nos puebla. Es probable que no exista escritor alguno que la haya podido esquivar, ni como tema. Dejar de tocarla, en sus preocupaciones creativas, para lo que sea: abrazarla, adorarla, solicitarla, temerle, rehuirle, reconocerle, desconocerle, gritarle, murmurarle...





La muerte, multimanoseada por músicos, pintores, escultores, bailarines, artistas de toda laya y hasta no artistas. Razón de ser de la filosofía de todos los tiempos. Motivo para pensar o escapar.





La muerte, cómo no, fue un tema recurrente en la poesía de José Alfredo Mondragón. Ahora podríamos decir, siempre se dicen esas cosas en retrospectiva, que hubiera parecido que José Alfredo, el poeta que naciera en El Oro, en febrero de 1956, sabía que moriría en uno de sus tantos retornos a Ítaca, el 31 de marzo de 1990. Temprana muerte a los 34 años de edad. ¿Alguna muerte no es prematura? Parecía que lo hubiera sabido por algunos de sus proféticos textos de añoranza adelantada. La palabra es poder que cruza el tiempo:





...Con esta mano

que es más polvo que silencio

puedo asir la luz

incendiar el rostro

que no alcanzo a entender

detener el tiempo y detenerme...




En su primer poemario, Metumbe, de dónde está tomado el anterior texto hay azoro y extrañeza por la ciudad, que pareciera envolver al hombre que la habita en un torbellino, velocidad para des-almarlo, quitarle el alma, arrojarlo a la muerte o recordar, contando las cuentas de alguien que es invocado:





...Inclinada sobre la piedra,

sobre la médula eléctrica de una avenida,

sobre el tronco que se extiende

como una pregunta,

la marea enciende los rumores,

los desborda como puñados de arena

hasta sentir la voz de las vértebras,

la identidad de alguien que recuerda una edad...


Benjamín Araujo

(fragmento)

Del ensayo de Benjamín Araujo Mondragón

"El león en llamas. José Alfredo Mondragón: Obra poética"

(Edición preparada por Marco Aurelio Chavezmaya)

Septiembre de 2006.

Colección: Raíz del hombre.

Instituo Mexiquense de Cultura.

viernes, 9 de septiembre de 2011

OBSESIÓN POR LOS NÚMEROS

Obsesión por los números;

la numeralia

como una manera

de dar vuelta a la vida:

para no mirarla

de frente,

cara a cara,

cifra a cifra...

con puntos y detalles...





Obsesión o nó,

los números tienen su lenguaje

que asfixia.





Juega a tomarnos

por el cuello,

aprieta hasta ahogarnos...

Los números tienen carácter

y espíritu;

saben de navegaciones,

de batallas,

de cruentas luchas

y de paz total:

como la paz

sepucral del cero...

jueves, 8 de septiembre de 2011

RUECA

Sales como si nada sucediera

cuando amanece



Te escondes tras los destellos

del sol

y en la bruma interna

de tu persona





Arrastras la cobija

y el cuerpo del delito

tu cuerpo



A tanto haberlo habitado

te dices

se ha vuelto sombra raída

luz destroncada

húmeda soledad

viscosa compañía

adjetivo de tercera mano



Transcurre el día

te escurres entre sus horas

y minutos

y segundos

quieres volcarlo todo

para qué

te preguntas

y no tienes respuesta

y te sorprende la noche

más vago

aún más desprendido de todo

que cuando amanece



En la noche te topas contigo

de frente

cara a cara

y te tocas y no te reconoces

adivinas acaso

quién ese ese que te habla

siempre en prima persona



Callas

y no te atreves a salir

cierras puertas ventanas

de las habitaciones

que te conforman



Eres casa vacía

llena de ruidos

y te inventas fantasmas

que moren tus estancias



Te confundes

no sabes bien a bien por qué

pero te sienta

ser ruido o fantasma

ya no tú

casa deshabitada





Todo es irremediable

te anuncias

te repites

das vuelta a la rueca

y la única palabra

fatalidad

acomoda a la vuelta y vuelta

irremediable

te reiteras



La nada está contigo

en noche calurosa

piel a piel

en ese sofocante momento

compartiendo sudores

y delirios



Tu hermana

añorada

inevitable

desde un rincón sonríe





Sabes bien que amanece

y esa rueda

trituradora

de sueños

continúa su vuelta



Otra vez:

sales como si nada sucediera

cuando amanece

te escondes tras los destellos

del sol

y en la bruma intensa

de tu persona






*Del libro Surco de palabras,

1984. Centro Toluqueño de Escritores,

colección becarios.

martes, 6 de septiembre de 2011

Desencuadernado: De otro lado

Desencuadernado: De otro lado: En los breves minutos en que tu amargura se ausenta y quizá sin quererlo me liberas de ser este enfermero roto recupera la luz su ...

ANOCHE, NO DORMÍ

Anoche,

fue la noche

de los resfríos del alma.



Una campana llamó

a panteonar recuerdo;

pero tramposo,

otro timbre interior,

insistente,

quería recordarlo todo,

detalle por detalle.



Mientras eso ocurría

el placer dormitaba,

pero en veces

gritaba

desde el interior

mismo del alma:

como queriendo confiar un secreto.



A tanto sucederse

esa guerra intestina,

el sueño quedó paralizado,

en un rincón

de la noche

como a la espera

de los acontecimientos.


En esa guerra bajo

la alfombra

de los recuerdos;

todo parecía dormitar,

pero nada era cierto.



Lo cierto,

lo único comprobable

y comprobado

fue que no dormí.


Y de ello es espejo

fiel

mi cara,

mi rostro sombrío

y mis ojeras....

Libra *M*... Recitando el poema: "Amor o sueño" de Edgardo Palacios

Sad orchestra song

lunes, 5 de septiembre de 2011

RESEÑA (fragmento)...



.“Serà mi asilo el mar. Biografìa de Josè Marìa Heredia y Heredia. 1803-1839”
La segunda ediciòn de Serà mi asilo el mar, de Benjamìn Araujo, con algunas correcciones y agregados, tiene la fortuna de aparecer en el Bicentenario del natalicio de Josè Marìa Heredia y Heredia (1803-1839), poeta fundamentalmente pero asimismo destacado ensayista, traductor, narrador, periodista, abogado y precursor de Josè Martì en la lucha por la independencia de Cuba, su patria natal.
Desde su primera estancia en Mèxico (1819-1821), y aùn antes, Heredia dio muestras de su extrema precocidad. No es casual que haya sido iniciador del romanticismo en Ibero Amèrica; en buena medida lo explica su formaciòn, a cargo de sus padres Josè Francisco de Heredia y Mieses y Marìa de las Mercedes Heredia y Campusano, queincluyò la lectura de los clàsicos y la pluralidad lingûÌstica.
Revitalizar la vida de un hombre probo como Heredia y Heredia, humanista y liberal de amplios vuelos, en estos momentos de confusiòn ètica, parece oportuno y necesario, amèn de que, como director del Instituto Literario, por lo que viviò en Toluca, y diputado del Estado de Mèxico, participò intensamente en la vida colectiva regional y, por ende, forma parte de nuestra identidad.
Esta obra se suma al alto nùmero de biografìas y estudios sobre Josè Marìa Heredia y Heredia y su obra que, pese a su cantidad (y la brevedad de la vida de Josè Marìa), no lo agotan como apasionante tema. Destacan, entre otros autores que lo han abordado: Nicolàs Rangel, Rafael Estenger, Andrès Bello, Elìas Zerolo, Enrique Josè Varona y Pera, Enrique Piñeiro y Barrio, Arturo Arnaiz y Freg, Antonio Canovas del Castillo, Josè Marìa Chacòn y Calvo, Emilio Valdès y de la Torre, Francisco Gonzàlez del Valle, Manuel Garcìa Garòfalo Mesa, Gustavo G. Velàzquez, Manuel Villanova, Nestor Ponce de Leòn, Inocente Peñaloza, Antonio de la Peña y Reyes, Raimundo Lazo, Marcelino Menèndez y Pelayo, Josè Yurrieta Valdès y Alejandro Gonzàlez Acosta.

Francis Goya - September morning

Jhon Lennon - Woman

domingo, 4 de septiembre de 2011

Regalame esta Noche Interpretado por el Saxofonista MAYA

Bésame mucho.Saxo Romántico

Candilejas - Saxofón Romántico

NANA CUCHI





Nana Cuchi esposa de Tata Coriachi

se citó una mañana con los astros

para danzar

en tierras de tarascos





Tranquila

faz de calma

botón de rosa nueva

se arrullaba

a si misma

con la parsimonia-humildad-majestuosidad

que sólo la luna hecha hembra michoacana

puede poseer





Su frágil estilo de ser

provocó el sentimiento sobrehumano

cósmico:

convertirse en transparente lucero y poseerla



Nana Cuchi

flor de hoy mismo

llévame con tu paso / tu danza

por las milpas

las sendas

los caminos/montaña

donde tu rostro/sexo

culminó a este punto

en que te vi sin tú verme Nana Cuchi

Elévame al olimpo prehispánico

lejos de este lugar

quiero saberte






A propósito, 1981.

Universidad Autónoma del Estado de México.

Colección XXV Aniversario.

sábado, 3 de septiembre de 2011

♥♫ - Francis Goya - Le comparsa -

VOZ A DOS VOCES

I

Codo a codo

de espalda a pecho erguido

mi pueblo

una mañana nueva

Don Quijote



II

¡Bestia!

¡Perro!

¡Hermano!

dime ya ¿en qué recodo te has metido?

¿dónde escondes tus huesos?

dime ¿por qué te guardas?

hermano perro



I

Codo con codo

un día

gran cadena invencible

Don Quijote

te digo

ya la mañana empieza

hoy temprano fue Cuba

y cuando Chile

su enorme despertador-conciencia componía

la junta militar

la junta milichet

la junta miliCIA

retrasó el gran reloj

...que no se pararía



!!

¡¡¡Bastardos todos del mundo

muy bien que os va reunidos...!!!



I

Don Quijote

mi amigo

deja ya a Rocinante el ceño de solemne

únete

pega

sobre tu cervantina faz

cyrano rostro

para echar trompetillas

sobre la mierda clase que domina



II

Pero el hombre

se queja

hasta del triunfo

parece su quejar

lo que acomoda mejor

al muerto

que cargamos

y cargamos

y cargamoscargamoscargamos

hasta que

cae

en nuestra fosa

tan personal e íntima

como sólo la muerte

suele ser

de privada



I

¡¡¡Que el pueblo se levanta!!!

es lo importante

que yo lo esté diciendo

es lo que menos importa

¡cuando ya se levanta!



A propósito, 1981.

Universidad Autónoma del Estado de México.

Colección XXV Aniversario.


El Canto general de Neruda se revela en la Biblioteca Nacional

MIL POEMAS A PABLO NERUDA EN SAQSAYWAMAN, CUSCO